Hola, ¿cómo están?, ¿cómo han sentido el frío en estos días? ¿no se les antoja un atole?
La verdad a mí si se me antojo un rico atole blanco de maíz como los que preparaba mi abuelita, recuerdo que se despertaba muy temprano para preparar el atole, la preparación era algo especial porque todo era hecho a mano y con ese amor que las abuelitas les ponen a todo. Por eso he decidido compartirles la receta y más que todo contarles cómo se prepara un atole blanco de maíz, espero que les guste.
Los ingredientes son:
3 Taza de maíz
3 Litros de agua
Preparación:
Primero se tiene que partir el maíz, es decir molerlo de preferencia con el metate o puede ser con un molino de esos que en el pueblo llamamos de “mano” y si no llevarlo a algún lugar donde tengan un molino de motor, tiene que quedar de un tamaño considerable, ni muy grande los granos, ni tampoco hacerlo polvo.
Se pone a remojar el maíz partido desde una noche antes en una bandeja grande con el agua.
Al día siguiente en la mañana con la ayuda de un colador se sacan todas las cáscaras del maíz, solo se dejan los pequeños granos blancos del maíz.
En una olla de barro o en una jarra se pone el agua donde se estaba remojando el maíz y se deja a fuego lento, se mueve constantemente para evitar que se queme.
Después que comenzó el hervor se pone los granos de maíz que quedaron en el recipiente.
Dejar hervir hasta que los pequeños granos estén bien cocidos, si está muy espeso poner más agua y dejarlo que hierva.
Apagar el fuego y ya está listo para servir.
Al compartirles la preparación me trajo muchos recuerdos de cuando vivía en el pueblo y veía a la abuelita preparar estas ricas bebidas, tener la olla de barro junto al comal donde ya estaba haciendo sus tortillas, para poder disfrutar de un desayuno con toda la familia y de una buena platica.
